El potencial de la primera reserva ecológica del Departamento empieza a fortalecerse con una iniciativa que impulsa la subsecretaría de Turismo de la Gobernación del Atlántico.
Se trata de Luriza, un bosque tropical húmedo de 837 hectáreas, ubicado en el municipio de Usiacurí al que se les están dirigiendo una serie de acciones con las que se espera convertirlo en un nuevo punto de atracción turística para aquellos que disfrutan de la naturaleza.
La importancia de Luriza radica en que además de albergar riachuelos y una exuberante vegetación es reconocido como hábitat del mono aullador y el mono tití, especies declaradas en peligro de extinción.
Según lo explicado por el sub secretario de Turismo de la Gobernación del Atlántico, Carlos Martín-Leyes, el proyecto “Inmersión al ecoturismo” está constituido en 5 componentes: embellecimiento de fachadas, protección al medio ambiente, inmersión al ecoturismo, prevención de desastres y generación de ingresos.
“Se van a pintar 15 casas con tonos fuertes y diseños artísticos en los que se incluyen elementos de reciclaje como botellas plásticas con las que se hacen mariposas y estrellas multicolores con las que se le da vida a estas casas que se mimetizan muy bien con el ambiente natural”, expresó el subsecretario de Turismo de la Gobernación.
La Asesora para asuntos de Turismo del Atlántico, Mónica Urueta añadió que lo más significativo es que estos talleres tienen como prioridad involucrarlos en el proceso para hacerles entender que ellos viven en una zona privilegiada que deben conservar.
“La gente lo ha asumido así. Aquí nadie entra con la intención de sacar algo de aquí, es más, el 5 de octubre pasado una mica parió y la gente tiene muy presente cual es el nuevo miembro de la familia de esta reserva ecológica”, sostuvo Urueta.
Así mismo, agregó que para ellos es natural hablar de los saberes ancestrales y no saben que todo esto puede tener una retribución económica porque hay turistas que pagan por visitar espacios como estos donde la tranquilidad y el contacto con la naturaleza les resulta muy atractivo.
La Gobernación del Atlántico ha comprado, durante la Administración Segebre, 90 hectáreas de terreno en Luriza y tiene proyectado 91 más.
La beneficiaria Judith Márquez afirmó que esta navidad será muy distinta a las anteriores. “Nosotros cogemos las botellas plásticas y hacemos los reciclajes, ya no la vamos a botar como anteriormente porque estamos trabajando en pinturas con botellas para adornar nuestras casas para que ahora en diciembre se vea muy bonita en nuestra navidad”.
De igual menera, el señor Manuel Amaranto agradece la llegada de este proyecto porque permite ver su casa distinta. “Ahora que tengamos todos las casas bien bonitas, miraremos que vamos a hacer para que lleguen los turistas por aquí”, afirmó.
El operador del proyecto es la Fundación Construyendo Vidas HK21 y la representante de esa organización, Gina María Rosso destacó el trabajo que se está haciendo con la comunidad. “Nos gusta mucho traer algo para ellos que lo reciben con mucho agrado, son personas muy agradecidas con el simple hecho que se les cambie la fachada y poco a poco entienden que esto es para un proyecto que va más allá”.
Finalmente, el coordinador de la pintura de viviendas de la comunidad, Gregorio Márquez Ortiz invitó a todos los que visitan o viven en la reserva ecológica que apliquen la fórmula que el viene aplicando: “Practiquen las tres ‘r’: reciclaje, recogerlo y reutilizarse para transformarlo en flores, accesorios, aretes y cinturones”, puntualizó
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